El otoño es una estación de transición: los días se acortan, las temperaturas bajan y la naturaleza comienza a recogerse después del verano. En Ayurveda, este período está asociado principalmente al dosha Vata, caracterizado por el aire y el éter: movimiento, sequedad, frío e inestabilidad.
Cuando Vata se desequilibra, podemos sentir insomnio, ansiedad, piel seca, digestiones irregulares o sensación de cansancio. Por eso, el otoño es un momento clave para cuidar nuestro cuerpo y nuestra mente con rutinas que aporten calor, estabilidad y nutrición.
A continuación te comparto algunos consejos ayurvédicos sencillos para vivir el otoño con equilibrio y energía:
1. Alimentación cálida y nutritiva
Opta por comidas calientes y cocinadas. Las sopas, cremas de verduras, guisos suaves y el arroz basmati son ideales. Añade especias que calientan y ayudan a la digestión, como jengibre, canela, comino o cúrcuma.
Evita en exceso los alimentos fríos, crudos o muy secos, que tienden a aumentar Vata.
2. Rutina diaria (Dinacharya) para el otoño
- Aceite en la piel: aplica un automasaje con aceite tibio de sésamo antes de la ducha. Esto nutre la piel y calma el sistema nervioso.
- Sueño regular: acuéstate pronto para compensar la energía dispersa de Vata.
- Respiración y calma: dedica unos minutos al día a ejercicios de respiración profunda o meditación para mantener la mente estable.
3. Infusiones y bebidas que equilibran
Toma infusiones calientes con hierbas como regaliz, hinojo o manzanilla, que hidratan y suavizan. El clásico golden milk (leche con cúrcuma, canela y jengibre) es perfecto para esta época.
4. Movimiento consciente
El cuerpo necesita mantenerse activo, pero sin excesos. Un yoga que nos aporte estabilidad ayuda a equilibrar el cuerpo y despejar la mente. Evita entrenamientos demasiado intensos que puedan aumentar la sensación de sequedad y fatiga.
5. Crea un entorno acogedor
El Ayurveda también nos recuerda que el espacio influye en nuestra salud. En otoño es recomendable rodearte de calidez: mantas, velas, colores tierra y momentos de descanso. El hogar puede ser un refugio que te invite a bajar el ritmo y sentir estabilidad. ¡Tenlo en cuenta también para tu práctica de yoga en casa!
Conclusión
El Ayurveda nos enseña que cada estación tiene una energía particular y que adaptar nuestras rutinas a ella es clave para mantener la salud y el bienestar. En otoño, escuchar al cuerpo, nutrirnos con alimentos calientes y crear hábitos calmados nos ayuda a mantener el equilibrio frente a la fuerza de Vata.
Pequeños gestos marcan una gran diferencia: una taza caliente, un masaje con aceite, una práctica de yoga… todo suma en el arte de cuidarnos de manera natural.
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